El paso del huracán Florence en la costa este de Estados Unidos mató a 41 personas, pero el triste número sigue aumentando. Las víctimas de esta catástrofe natural también son los animales, especialmente los que se ven obligados a vivir en la agricultura intensiva.
3,4 millones de gallinas y pavos, 5.500 cerdos habrían muerto debido a la inundación provocada por el huracán Florence. Esto lo dice el Departamento de Agricultura de Carolina del Norte.
“Fue una tormenta sin precedentes con inundaciones que superaron todas las expectativas. Sabemos que también habrá pérdidas agrícolas significativas porque las inundaciones han afectado a seis condados de nuestro estado ”, dijo el comisionado de Agricultura Steve Troxler en un comunicado de prensa.
Como decíamos, los animales también son víctimas directas de esta calamidad: si se han salvado muchos perros y gatos, la mejor suerte no ha sido la de los cerdos, gallinas y pavos que vivían en granjas intensivas.
Las fotos aéreas muestran las granjas completamente sumergidas por el agua y el número de muertos es muy alto, aunque es imposible hacer una estimación precisa.
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De hecho hay quienes han muerto por la tormenta de viento, por el agua o por el derrumbe de edificios, hay muchos otros cerdos y que se mueren de hambre porque es imposible llegar a la granja.
Durante la tormenta, los ganaderos intentaron trasladar a los animales, pero dada la gran cantidad fue imposible y, paradójicamente, el huracán Florence pone de manifiesto la inutilidad de la agricultura intensiva.
Sabemos que la mayoría de los cerdos, pollos y pavos estaban destinados al matadero, pero los activistas por los derechos de los animales vieron el número de muertos como un reflejo de un sistema que no mira en absoluto el bienestar animal.
"Los animales son tratados como mercancías en lugar de seres vivos que tienen derecho a vivir, están enjaulados y les es imposible escapar cuando los desastres azotan la ciudad", dice Susie Coston, directora de Farm Sanctuary.
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Pero no solo eso, el impacto del huracán Florence en las granjas también presenta riesgos para la salud humana, todos los excrementos de animales pueden terminar en las lagunas, lo que representa un peligro para las personas con un sistema inmunológico bajo así como para el ecosistema marino.
Dominella Trunfio
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