Parece que lo peor ha pasado en Venecia: la nueva marea máxima prevista para ayer se detuvo en 150 centímetros y hoy el máximo de pleamar previsto es de 110 centímetros en torno a 13,20. También se decidió la reapertura de escuelas y algunos museos.
Piazza San Marco transformada en piscina. Esta es la impresionante imagen de Venecia que ha dado la vuelta al mundo en los últimos días. Hacía muchos años que no se veía tanta agua (precisamente desde 1966) y la ciudad, como os hemos contado en varios artículos, ha sufrido mucho daño.
La marea alta de ayer, la tercera peligrosa en tan sólo una semana, alcanzó los 150 centímetros, inundando casi el 70% del centro histórico, pero afortunadamente se calmó rápidamente.
Ahora el miedo parece haber pasado, los venecianos se han arremangado y están reabriendo las distintas actividades con todas las dificultades que, por supuesto, aún existen.
La pleamar prevista para hoy no superará los 110 centímetros y también se esperan los mismos valores para mañana. Por tanto, es necesario empezar de nuevo y de alguna manera volver a la normalidad, por lo que escuelas de todos los niveles están retomando ahora sus actividades incluso en el centro histórico.
Todos los edificios escolares vuelven a estar en funcionamiento tras las obras de restauración llevadas a cabo tras los daños provocados por la extraordinaria pleamar del pasado martes. Las únicas excepciones son el colegio Santa Teresa en Dorsoduro y el San Francesco alla Giudecca para los que aún queda trabajo por hacer antes de poder volver a la normalidad (los niños que asistan seguirán retomando lecciones de otros colegios).
#aquaalta | Todas las escuelas estarán abiertas mañana. Próximamente estarán disponibles los formularios con los que ciudadanos y empresas pueden solicitar indemnización por daños. ¡Gracias a todos los que trabajaron duro para pasar este día también! pic.twitter.com/w8QJuGMRgd
- Luigi Brugnaro (@LuigiBrugnaro) 17 de noviembre de 2021
Aunque se mantiene el estado de alerta por marea alta, algunos museos también están reabriendo e incluso los vaporettos están en funcionamiento.
La ciudad aún cuenta los daños, pero mira hacia adelante con valentía:
"Nos levantaremos como el Fénix, lo importante es que el país esté unido", dijo el alcalde Luigi Brugnaro.
Francesca Biagioli
