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Perder a alguien que amamos, ya sea humano o animal, es una experiencia muy difícil de procesar. Para ayudar a mantener vivo el recuerdo, muchos de nosotros guardamos un pequeño recordatorio del perro o gato que ya no está. Una empresa estadounidense pensó entonces en dar la posibilidad de transformar las cenizas de las mascotas en patas de vidrio para guardarlas para siempre.

La empresa en cuestión se llama Davenport Memorial Glass, está ubicada en North Idaho (USA) y se especializa en la creación de este tipo de recuerdos. Crea piezas conmemorativas de animales de cristal utilizando una pequeña cantidad de ceniza.

La reproducción de las patas del animal que nos dejó son el objeto más popular, además porque son pequeñas y se pueden llevar fácilmente contigo. Pero también hay otras posibilidades, siempre en cristal, como colgantes circulares, corazones, un elefante para guardar como adorno o una urna pequeña clásica.

Aunque las mascotas se han convertido en parte fundamental de nuestras vidas, no existen costumbres formales para conmemorarlas después de la muerte. Generalmente optan por enterrarlos, pero todavía quedan muy pocos cementerios para mascotas y no todas las personas tienen un jardín donde poder guardarlos (ahora en Italia también hay un proyecto de ley para poder ponerlos en las tumbas junto con los propietarios).

De ahí la idea de la sociedad estadounidense: si no tiene un cementerio de mascotas cerca o siente que un entierro formal es demasiado desafiante, los monumentos conmemorativos pueden ser una alternativa. Simplemente tome algunas de las cenizas de su mascota y envíelas a Davenport por correo.


En realidad, la empresa también produce objetos de vidrio sin agregar cenizas, pero ciertamente se ha dado a conocer por esta posibilidad innovadora. El propietario, entre otras cosas, ha desarrollado una técnica especial para usar las cenizas de esta manera (insertarlos en el vaso, de hecho, hace que su procesamiento mucho más difícil), pero en el momento que lo mantiene en secreto.

¿Qué piensas? ¿Comprarías alguna vez un objeto así para mantener vivo el recuerdo de tu mascota? Aquí la operación parece de dudoso gusto, pero en Estados Unidos está teniendo un buen éxito.

Francesca Biagioli

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