En otoño caen las hojas y la naturaleza adquiere nuevos colores. ¿O no? En Japón, a mediados de octubre, estamos presenciando un fenómeno completamente fuera de temporada: la famosa flor de cerezo o hanami.
Las delicadas flores de cerezo suelen dar la bienvenida a la primavera creando una alfombra rosa en Japón, desde las estribaciones del monte Fuji hasta varias áreas y parques en todo el país. Turistas de todo el mundo acuden en masa para admirar el hanami cada año. En abril, en mayo, pero no en octubre.
Según los expertos, las floraciones tardías podrían ser el resultado del clima inusual de este año, incluida una temporada de tifones particularmente activa. Japón fue azotado por una serie de tifones este año, incluido Jebi, que se cobró 11 vidas y cerró el aeropuerto de Kansai en septiembre.
Weathernews, una compañía meteorológica, dijo que más de 300 personas en todo Japón informaron haber admirado las flores de cerezo en su vecindario en una encuesta realizada la semana pasada.
En el exterior, el color blanco y rosa son los sitios más famosos donde se puede admirar el hanami en primavera. Lástima que sea otoño.
Según Hiroyuki Wada, un botánico de la Asociación de Flores de Japón, los patrones climáticos inusuales podrían ser responsables de esta floración sorpresa fuera de temporada.
¡Tengo unas vibraciones de 5 centímetros por segundo aquí! #cherryblossom #hanami pic.twitter.com/7e06KWIJL0
- Veronica Phillips (@MoveOolong) 17 de octubre de 2021
Además, según Wada, las violentas tormentas que han arrancado las hojas pueden haber provocado que los cerezos florezcan por segunda vez en un año . Estos últimos suelen liberar una sustancia química que inhibe la floración antes de la primavera.
Una serie de días inusualmente cálidos después de los tifones también pueden haber "confundido" las plantas.
“Había sucedido antes, pero no recuerdo haber visto nunca algo tan grande”, dijo Wada.
¿Estará en riesgo? No, según Wada ya que, aunque abundantes, ahora solo se han abierto unos pocos brotes. Un otoño que parece primavera, nosotros también lo notamos, probablemente citando la frase habitual: “Ya no hay medias estaciones”, pero la Naturaleza muestra los signos, bella e inquietante.
Francesca Mancuso
