Ya es oficial: Coca Cola ha firmado un preacuerdo para la adquisición de la reconocida empresa italiana de aguas minerales y refrescos Lurisia . Slow Food reaccionó de inmediato, anunciando el final de la colaboración con la histórica marca de bebidas.
La empresa Coca Cola HBC Italia ha cerrado un nuevo acuerdo al adjudicarse por 88 millones de euros (precio sujeto a ajuste según la práctica del mercado) Lurisia, la histórica empresa de Cuneo que produce aguas minerales y refrescos como gazzosa, naranjada y chinotto. La empresa es actualmente un grupo controlado por el fondo de inversión privado IdeA Taste de Italia, por la familia Invernizzi y por Eataly Distribuzione.
La adquisición por parte de Coca Cola se completará a fines de 2021, pero el actual presidente y CEO de Lurisia, Piero Bagnasco, así como Alessandro Invernizzi, permanecerán en el directorio para garantizar la continuidad con la administración anterior, así como tranquilizar a los accionistas.
La fábrica piamontesa se suma así a las 4 plantas de Coca-Cola HBC Italia ya presentes en nuestro país (ubicadas en Campania, Abruzzo, Basilicata y Veneto) por un valor total de casi 45 millones de euros.
Slow food no se tomó bien la noticia y ya ha anunciado que, tras la adquisición de Lurisia por Coca Cola, dejará de trabajar con la compañía. Lurisia ha sido socio de los principales eventos organizados por Slow Food durante varios años, pero es evidente que la cooperación ya no es posible después de esta elección.
Como leemos en una nota:
“Aprendemos de la prensa sobre la transferencia de propiedad de Lurisia Spa al grupo Coca Cola. La empresa Lurisia apoya las actividades de Slow Food desde 2007, principalmente como colaborador de grandes eventos: Cheese, Slow Fish y Salone del Gusto. La colaboración finaliza con la edición 2021 de Cheese, que no se renovará ”.
Francesca Biagioli
