Tabla de contenido

Un instituto que promueve la investigación ética, aquella que no utiliza animales como conejillos de indias de laboratorio, respeta el medio ambiente y relanza inversiones en el sur de Italia. El Instituto de Investigación Científica SESP ha estado en Scicli en Sicilia durante un par de años.

Por un lado, para generar un cambio de rumbo a favor de los animales, por otro, para evitar la fuga de cerebros a países extranjeros. Ciertamente, los tiempos no son los únicos en los que un investigador puede brillar en Italia y especialmente en el sur de Italia (con excepciones), pero hay quienes, afortunadamente, todavía creen en ello y se ponen en marcha para crear oportunidades de empleo.

Presentado en 2021, el SESP nació gracias a Daniele Tedeschi, fisiólogo y partidario de un tipo de investigación científica sin el uso de animales, sino con métodos que no son muy invasivos para el medio ambiente. Como era de esperar, el Instituto nació en una tierra maravillosa hecha de olivos y granadas.

Uno de sus objetivos era crear el Parque Científico Ético de Salipetra, que es un oasis feliz donde todo gira en torno al concepto de ética, un lugar de acogida, trabajo y desarrollo para los investigadores sicilianos y de todo el mundo que quieran tener un enfoque que respete a los pacientes, los animales y la naturaleza.

“Un espacio de encuentro e intercambio entre investigadores, profesionales, familias, pacientes, empresas, instituciones de investigación, universidades, asociaciones y organismos públicos, para que el conocimiento y la información sean continuos y completos en el respeto mutuo y sobre todo en la escucha de necesidades mutuas ”, reza la presentación del Instituto.

Toda la zona alrededor de la estructura es eco-sostenible y los edificios se han construido con materiales respetuosos con el medio ambiente, por lo que la atención se centra también en el ahorro energético y la máxima eficiencia.

Pero, ¿qué se hace dentro del SESP?

El Centro sigue a los pacientes de toda Italia que presentan alteraciones del ADN que no suelen estar presentes en los padres y respuestas neuroautoinmunes y autoinmunes. También se estudia la conexión entre los cambios ambientales (en particular los derivados de la nutrición), algunas neurodegeneraciones (Alzheimer y Parkinson) y algunas enfermedades oncológicas.

También se están realizando experimentos sobre biorreactores y microchips, pero sin entrar en demasiados detalles científicos podemos decir que la estructura es un centro privilegiado para observar cómo cambia la naturaleza humana a lo largo del tiempo y el hecho de que se haga respetando el medio ambiente es un valor añadido.

Te podría interesar:

  • Experimentación animal: el ratón como modelo no funciona, dicen los investigadores
  • Vivisección: los 5 animales más utilizados y maltratados
  • #cleanupcruelty: no a las pruebas en animales de detergentes (PETICIÓN)

Entre otros proyectos, también el realizado con escuelas, donde niños y profesores del Instituto dan vida a iniciativas de recuperación de zonas verdes, plantando algarrobos, almendros y olivos.

Dominella Trunfio

Entradas Populares

Origami, el magnífico arte japonés de doblar papel (VIDEO)

La palabra origami en japonés indica el arte de doblar papel. Una tradición que concierne a Japón pero que en otras formas también está presente en China, Arabia y Occidente. El Día Mundial del Origami se celebra el 11 de noviembre para fomentar la difusión de este arte centenario.…