China también tiene su propia carretera soleada. Se acaba de inaugurar una sección de la carretera fotovoltaica desarrollada por el Grupo de Desarrollo de Transporte Qilu. Se encuentra cerca de Jinan, la capital de la provincia china de Shandong y forma parte de la carretera de circunvalación que rodea la ciudad.
Esta autopista tiene tres niveles: los paneles fotovoltaicos se ubican en el centro, en la parte inferior hay una capa aislante mientras que encima de los paneles, para protección, hay una capa transparente y portante que permite la penetración de la luz solar.
Los paneles se extienden sobre un área de 5.875 metros cuadrados, cubriendo dos carriles y un carril de emergencia. Son capaces de generar un millón de kilovatios hora de energía limpia al año, la misma que cubriría las necesidades diarias de unos 800 hogares, según Qilu Transportation Development Group, el desarrollador del proyecto.
La electricidad producida por este tramo se utilizará para alimentar alumbrado público, letreros, cámaras de vigilancia, túneles y casetas de peaje, pero no solo. El exceso se suministrará a la red estatal. También está diseñado para suministrar energía a las estaciones de carga de vehículos eléctricos tan pronto como se agregan.
El diseñador Zhang Hongchao dijo que la carretera puede soportar 10 veces más presión que las pavimentadas normales.
Una confirmación más de la voluntad de China de centrarse en la energía solar. A pesar de ser uno de los países del mundo que produce la mayor cantidad de emisiones contaminantes, el gigante asiático es también el principal productor mundial de energía solar. En 2021, su capacidad fotovoltaica rondaba los 78 gigavatios, y para 2020 se espera que alcance los 105 gigavatios.
Números de registro. Para citar otro ejemplo, la ciudad de Huainan opera el proyecto fotovoltaico flotante más grande del mundo, que una vez completado podrá alimentar a casi 100.000 hogares.
Esta no es la primera carretera fotovoltaica del mundo. Ya existen varios proyectos de este tipo. Hace aproximadamente un año Francia inauguró su solar strasda, el proyecto WattWay de Colas que cubrirá las necesidades energéticas de 3.400 personas, en el centro de Tourouvre-au-Perche. Incluso en Estados Unidos, un tramo de la famosa Ruta 66 se ha vuelto fotovoltaica. Los carriles bici también aprovechan el sol, especialmente en los Países Bajos, donde Solar Road es ahora una realidad.
El tramo inaugurado tiene 1 km de largo, pero pasará algún tiempo antes de que el proyecto pueda expandirse, principalmente debido a los mayores costos en comparación con las carreteras normales. De hecho, se habla de 3.000 yuanes por metro cuadrado (unos 385 €).
Francesca Mancuso
