Producir agua potable desde cero , utilizando únicamente energía solar. No es ciencia ficción sino una posibilidad ya existente. Se llama SunGlacier Watercube DC03 y es un cono especial que extrae y recoge la humedad del aire utilizando energía limpia. Una solución que podría garantizar el agua en zonas del mundo donde falta.
Está concebido por un viejo conocido nuestro, Ap Verheggen, que lleva diez años diseñando dispositivos que aprovechan el potencial del sol para extraer agua del aire, incluida la famosa hoja del desierto.
Esta vez, sin embargo, no es solo un boceto, un borrador en papel. El último proyecto es real y está disponible en línea. Se llama Sunglacier DC03 y le permite producir una pequeña cantidad de agua limpia todos los días. El dispositivo se suministra sin batería, sin ventiladores ni inversores, y sin partes móviles que puedan dañarse fácilmente.
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“Pudimos producir agua solar sin ventilador, batería o convertidor: conectado directamente a un panel solar. Esto significa que acabamos de dar los primeros pasos en el desarrollo de un dispositivo solar extremadamente económico y sin mantenimiento. No hay partes móviles ”, explica el equipo.
El DC03 produce energía gracias a una celda Peltier de 18W . Esta última es una pequeña baldosa que actúa como bomba de calor: una de las dos superficies absorbe el calor mientras que la otra lo emite.
WaterCube de SunGlacier - Ap Verheggen de sunglacier en Vimeo.
Si se conecta a la electricidad, se calienta por un lado y se enfría por el otro. El lado frío se usa para enfriar un cono. Cuando el aire llega al cono frío, la humedad presente en el aire comienza a condensarse y produce gotas de agua.
A su vez, el agua cae, por gravedad, en un pequeño recipiente. De momento, el dispositivo logra producir alrededor de medio vaso de agua cada 6 horas, no mucho pero ya es algo. DC03 fue diseñado para funcionar solo durante las horas del día, reduciendo la necesidad de una batería.
El primer paso hacia soluciones limpias que puedan llevar agua a zonas del mundo que carecen de ella.
Francesca Mancuso
