El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, decidió abrir 5,000 millas cuadradas de un área protegida del Océano Atlántico a la pesca comercial .
La medida, firmada el viernes pasado, podría poner en peligro aún más a cientos de especies en peligro de extinción y destruir el ecosistema frente a las costas de Nueva Inglaterra.
El área había sido declarada área protegida por la administración anterior, que estableció el Monumento Nacional Marino Northeast Canyon y Seamounts en 2021 para proteger a las especies en peligro de extinción y su ecosistema de la intrusión humana.
Trump decidió anteponer los intereses económicos a la protección ambiental al levantar la veda de pesca en la zona durante una reunión con pescadores.
Una decisión que ha levantado varias polémicas entre las asociaciones ambientalistas, ya que en la zona hay corales milenarios , ballenas en peligro de extinción y otras especies amenazadas.
“La apertura del único monumento nacional marino en el Atlántico no ayudará a nadie más que a un puñado de pescadores, con el riesgo de daños irreparables a la vida marina que no tiene otras áreas totalmente protegidas frente a nuestra costa este.
Corales antiguos y de crecimiento lento en aguas profundas, grandes ballenas y tortugas marinas en peligro de extinción y una increíble variedad de peces, aves marinas, tiburones, delfines y otros animales salvajes: estas son las especies y hábitats que pagarán el precio ". comentó Bob Dreher, vicepresidente senior del Programa de Conservación de Defenders of Wildlife.
Trump acaba de abrir un santuario marino a la pesca comercial, socavando las protecciones para ballenas, tortugas marinas, tiburones y corales en peligro de extinción.
En medio de las crisis nacionales, Trump está poniendo silenciosamente en riesgo a cientos de especies.
- Amigos de la Tierra (@foe_us) 6 de junio de 2020
Brad Sewell, director senior de océanos del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales (NRDC), dijo que estaba preocupado por la luz verde para la pesca comercial en el área, ya que plantea una serie de amenazas, incluido el daño de los aparejos pesados de pesca a los corales. de aguas profundas y el enredo de mamíferos en redes de pesca.
Sewell dijo que el NRDC está listo para emprender acciones legales contra la administración Trump para "proteger estos tesoros marinos del daño y la explotación por parte de la pesca comercial y otras industrias extractivas".
Fuentes de referencia: New York Times / Defenders of Wildlife
