¿Cómo se "quema" la grasa de nuestro cuerpo cuando perdemos peso? ¿A dónde va? Una investigación australiana lo revela y aclara

Ponerse a dieta. El mundo está cada vez más obsesionado (con más o menos razón dada la alta tasa de obesidad en los países occidentales) con la pérdida de peso. A pesar de esto, pocas personas saben a dónde va realmente la grasa que se pierde al perder peso .

A menudo, incluso los médicos, dietistas y entrenadores personales no saben exactamente cómo se "quema" la grasa de nuestro cuerpo. Así lo demuestra una investigación australiana publicada en el British Medical Journal y realizada con la coordinación del físico Ruben Meerman. El equipo de expertos entrevistó a 150 especialistas y encontró grandes lagunas en su conocimiento de cómo se transforma y elimina la grasa corporal.

La idea más común, pero errónea, es que la grasa quemada se convierte en energía, luego hay quienes incluso contestaron que se convierte en músculo o se elimina por el colon. Solo 3 personas dieron la respuesta correcta.

La misma investigación reveló cómo se transforma la grasa …

Cómo se transforma la grasa

La respuesta correcta es que la grasa se convierte en dióxido de carbono y agua. Estas dos sustancias se unen al torrente sanguíneo hasta que se dispersan del cuerpo en forma de orina o sudor.

Las investigaciones han demostrado que cuando se pierden 10 kilos de grasa, se desprenden 8,4 kilos de los pulmones mientras que los 1,6 restantes se convierten en agua. Básicamente, aunque es difícil de imaginar, casi todo el peso que perdemos se exhala de nuestro cuerpo a través del sistema respiratorio.

Como explicó Meerman:

"Bajar de peso significa desbloquear el carbono almacenado en las células grasas"

En realidad, no solo las grasas, sino todo lo que comemos, sale de nuestro cuerpo a través de los pulmones. Cada carbohidrato digerido y casi toda la grasa se convierte en dióxido de carbono y agua. Lo mismo ocurre con las proteínas, solo algunas de estas sustancias se transforman en urea y se excretan en la orina.

Lo único que llega intacto al intestino son las fibras. Todo lo demás es absorbido por la sangre y con el tiempo será expulsado gracias a la ayuda de los pulmones. La buena noticia es que incluso durmiendo perdemos peso, de hecho durante la noche exhalamos unos 200 gramos de dióxido de carbono.

Lo que aconsejan los expertos para bajar de peso

Desafortunadamente, no basta con respirar más para perder peso. Incluso si intentamos exhalar por más tiempo o más rápido, no seremos capaces de adelgazar, solo tal vez hiperventilar o sentirnos mareados. La única forma saludable que tenemos de aumentar la expulsión de dióxido de carbono, y por tanto quemar grasas y kilos de más, es haciendo ejercicio y en general moviéndonos más evitando un estilo de vida sedentario.

Una simple caminata triplica nuestra tasa metabólica pero también las actividades diarias como cocinar, pasar la aspiradora, barrer, etc. aumentan nuestra capacidad para exhalar. Por supuesto, señalan los expertos, cualquier dieta que proporcione menos "combustible" de lo que nuestro cuerpo necesita (es decir, una dieta baja en calorías) conducirá a la pérdida de peso, pero con cierta confusión en cuanto a dónde va realmente la grasa.

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Francesca Biagioli

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