La levanta y la abraza durante más de una hora. La historia de la niña de un año que escapó de un accidente en las calles de Palermo y su “ángel”, Cosimo Giuliani, un carabiniere , está circulando por la web. Y con ella la foto que los retrata en un tierno abrazo .
No son padre e hija, ni se conocían antes de ese accidente que causó tanto miedo y una corta estadía en el hospital para la madre de la niña .
Así como la joven madre se vio "obligada" a acudir a la asistencia médica en otro lugar, él, el hombre de uniforme, padre de mellizos, no lo pensó dos veces y se ocupó de la serenidad del recién nacido .
¿Qué ha pasado? El pequeño automóvil en el que viajaba la madre e hija termina el lunes pasado contra un camión y cuando la mujer es transportada al hospital, esperando la llegada de sus abuelos, el carabiniere Giuliani se ocupa de la pequeña. Una dulce imagen inmortalizada por un motorista que pasaba por viale Strasburgo y que ha tenido a bien publicar de inmediato en Facebook y que ahora se está volviendo viral.
Esa niña de un año, que apoya la cabeza en el hombro de un carabiniere que la sostiene en sus brazos, es la imagen exacta de los niños y todas esas esperanzas que inconscientemente depositan en nosotros los adultos.
“Solo cumplí con mi deber”, quiere decir Giuliani. Eso es cierto, y me gusta pensar que cualquier persona lo habría hecho. Contra un niño, así como hacia cualquier persona en dificultad.
Germana Carrillo
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