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Estamos acostumbrados a considerar a las plantas como seres inmóviles, indefensos, incapaces de comunicarse o percibir el entorno que nos rodea.

La realidad, sin embargo, es muy diferente y, si los árboles y las plantas no pudieran comunicarse entre sí y reaccionar a las condiciones externas, no podrían defenderse y no podrían haber sobrevivido en la Tierra durante cientos de millones de años.

Sabemos desde hace mucho tiempo que una de las estrategias de defensa y comunicación de las plantas se da gracias a la producción de moléculas volátiles que actúan como atracción para los insectos polinizadores, como repelente de depredadores o que pueden servir para advertir a otras especies de peligros inminentes.

Otra modalidad de comunicación vegetal consiste en la emisión de ultrasonidos y los investigadores de la Universidad de Tel Aviv se han concentrado en esta estrategia.

El estudio reciente investigó la capacidad de las plantas para generar sonidos en condiciones estresantes, incluida la escasez de agua o el corte de tallos.

Los investigadores probaron plantas de tabaco y tomate, colocando micrófonos de unos 10 centímetros y sometiendo los cultivos a condiciones de sequía y daños en hojas y tallos.

Tras sucesos estresantes, las plantas emitieron ultrasonidos entre 20 y 100 kilohercios , una frecuencia no perceptible para el oído humano pero detectable por otros organismos hasta varios metros de distancia.

La investigación encontró que la cantidad de "gritos ultrasónicos" emitidos por las plantas variaba según el tipo de estrés al que estaban sometidas.

Las plantas de tomate a las que se les cortó el tallo dieron unos 25 gritos por hora, mientras que las de tabaco que sufrieron el mismo daño generaron 15 gritos cada hora.

Cuando las plantas se vieron privadas de agua, la cantidad de sonidos detectados cambió: en los tomates aumentaron a 35 por hora, mientras que en el tabaco bajaron a 11.

Las plantas que no han sufrido ningún tipo de estrés, en cambio, emitieron solo un sonido en 60 minutos.

¿Por qué las plantas gritan cuando están bajo estrés y por qué la cantidad de gritos varía según el estrés que experimentan? Probablemente sea una estrategia para advertir a otras especies no solo del peligro inminente, sino también para ofrecer información sobre el tipo de peligro, para que otros ejemplares puedan poner en marcha mecanismos de defensa específicos para afrontar la situación de la mejor manera.

Los resultados del estudio, además de hacernos cuestionar la idea de que el mundo vegetal está en silencio, ofrecen una herramienta interesante que podría ser explotada en investigación y agricultura.

Sin embargo, para comprender mejor la emisión de sonido y las interacciones con el medio ambiente de las plantas, son necesarias más investigaciones que analicen, por ejemplo, el impacto de las enfermedades, el estrés salino y los cambios de temperatura en la producción de sonidos.

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