Un esqueleto de tamaño natural, completo con órganos que reproducen fielmente los originales. Si pensaba que vio (y se dio cuenta) de todo, está equivocado.
La creación bastante extraña se debe a un verdadero artista de crochet, Shanell Papp, que tiene muchas otras obras en su haber, desde máscaras hasta charcos de sangre, pero su esqueleto es sin duda uno que ha despertado más revuelo.
En 2005, Papp tejió un cadáver completo, creando huesos y órganos de lana para llenar el esqueleto de tamaño natural. No falta nada: pulmones, corazón, hígado, intestino delgado y grueso, todo elaborado con diferentes colores y lo más parecido posible a los órganos originales. Los huesos del esqueleto también son muy detallados, perfectamente proporcionados.
La mujer que vive y trabaja en Alberta, Canadá, no es una “tejedora” cualquiera, sino que aprendió a usar el crochet de forma autodidacta cuando solo tenía 9 años.
Shannell creó el esqueleto para un proyecto de investigación universitario sobre tejidos, anatomía y arte llamado BAWDY.
“Hice el esqueleto para explorar mi cuerpo mientras estudiaba arte en la Universidad de Lethbridge”, explica. “Antes de hacer este trabajo, tenía un gran interés en la historia médica, Frankenstein, el pensamiento de la Ilustración, el período victoriano, el nacimiento de la industria (producción textil), las investigaciones de delitos, las prácticas mortuorias y los museos…. Hice este trabajo para explorar mi interés por el cuerpo humano ”.
Ciertamente no la bufanda habitual o el centro de mesa …
Francesca Mancuso
Foto: Shanell Papp
