El príncipe Harry podía despedirse de la caza. Según informan algunos tabloides ingleses, no participará del Boxing Day, la habitual cacería de faisán que por "tradición" se realiza el 26 de diciembre con su hermano William en Sandringham.
En la base de esta decisión, podría estar su esposa, la duquesa Meghan Markle, quien siempre ha sido una amante de los animales y se opuso a su explotación y caza.
El príncipe Harry ha estado participando en este triste hábito familiar desde que tenía 12 años, pero según el Sunday Mirror, este año podría darse por vencido para pasar más tiempo con su esposa embarazada.
Las ideas de Megan ciertamente no son nuevas. Durante algún tiempo, activista vegana y activista de los derechos de los animales, la duquesa no usa pieles y siempre ha dicho que está en contra de la caza. Esto puede haber llevado al príncipe Harry a renunciar a la cita familiar por una vida tranquila.
Esto también lo confirma la Vegan Society, según la cual la decisión fue alentada por la posición de la duquesa en contra de la caza.
Dominika Piasecka, portavoz de The Vegan Society, dijo: “Estamos encantados de saber que la duquesa persuadió al príncipe Harry para que no participara en la caza del faisán real de Navidad. Las tradiciones son importantes para todas las naciones, pero si implican asesinatos sin sentido, no deberían continuar. Veganos o no, muchos británicos se oponen firmemente a la caza y esperamos que la familia real dé el ejemplo y deje de participar en esta cruel práctica ".
Pero, ¿es realmente así? Una fuente interna del Palacio de Kensington habría descartado todo, por lo que Harry podría asistir al Boxing Day como todos los años.
Si Harry dejara de cazar, en Sandringham pero también en otras ocasiones, podría dar un ejemplo importante, con la esperanza de que esta práctica macabra que muchos llaman deporte pueda ser erradicada.
Francesca Mancuso
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