Las avispas parásitas ya existían hace varios millones de años, pero un nuevo proyecto coordinado por el Instituto de Tecnología de Karlsruhe (KIT) ha permitido a los investigadores verlas por primera vez dentro de sus anfitriones.
Los científicos estudiaron las pupas de moscas antiguas utilizando imágenes ultravioleta. Encontraron 55 casos de parasitación y descubrieron hasta 4 especies extintas de avispas desconocidas hasta el momento.
Los fósiles que estudiaron los científicos fueron más de 1.500 pupas de moscas pertenecientes a las colecciones del Museo de Historia Natural de Basilea y del Riksmuseet Naturhistoriska de Estocolmo. A finales del siglo XIX, estos restos fueron recolectados en minas de fosforita en la región francesa de Quercy. En 1944, el entomólogo suizo Eduard Handschin describió los fósiles en detalle y enfatizó el valor de los fragmentos invisibles externamente, de solo 3 mm de largo.
Su hipótesis fue olvidada durante más de 70 años. En ese momento, Handschin había sospechado que había una avispa parásita de entre 34 y 40 millones de años dentro de las moscas, pero no pudo probarlo.
Aquí es donde comenzaron los investigadores del Instituto de Tecnología de Karlsruhe. Gracias a las nuevas tecnologías, como la micro tomografía de rayos X, han podido ver el interior de varias pupas de millones de años.
![](https://cdn.maisonjardin.net/1994486/4_nuove_specie_di_vespe_parassite_perfettamente_conservate_nei_loro_ospiti_da_40_milioni_di_anni_video_2.jpg.webp)
Los resultados del proyecto proporcionan información importante sobre la evolución del parasitismo. Este último está muy extendido e influye en los ecosistemas. Hoy, aproximadamente el 50% de todas las especies animales se consideran parásitos. La relación entre la diversidad de especies y el parasitismo es particularmente evidente en el orden de insectos Hymenoptera, al que pertenecen las avispas.
Como parte del proyecto coordinado por el KIT, los investigadores identificaron 4 especies extintas de avispas que antes eran desconocidas. Eran endoparásitos o especímenes que se desarrollan dentro de su huésped. Y eso es lo que hicieron las avispas en el Paleógeno. Cada uno tenía su propia estrategia de adaptación. El observado con más frecuencia de los 4 fue llamado por los científicos "Xenomorphia resurrecta". El género "Xenomorphia" toma su nombre de la criatura de la serie de ciencia ficción "Alien", también conocida como Xenomorph y también se desarrolla endoparásitamente. El nombre de la especie "resurrecta" se refiere a la "resurrección digital" de la especie, dice el coordinador del proyecto, el Dr. Thomas van de Kamp:
![Google Translate](https://cdn.maisonjardin.net/https://www.gstatic.com/images/branding/product/1x/translate_24dp.png.webp)
"Nuestro proyecto demuestra que vale la pena volver a estudiar las colecciones antiguas con las últimas tecnologías".
De hecho, nos han permitido probar por primera vez la existencia de criaturas nunca antes vistas.
Francesca Mancuso